El clamor por las preferentes no cede
Cientos de personas se manifiestan en varias ciudades exigiendo la devolución de sus ahorros
Ni el escándalo de las indemnizaciones, ni las disparatadas necesidades de capital de la caja fusionada, ahora banco, han originado ningún castigo contra sus antiguos responsables. Los afectados por las preferentes, sin embargo, se encargaron de recordar ayer en varias manifestaciones que ellos son “los únicos sancionados” —les han impuesto multas por alterar el orden público— pese a ser víctimas del naufragio financiero. En Vigo, unas 400 personas marcharon hasta la sede de Novagalicia. En A Coruña otro grupo hizo lo mismo, y en Pontevedra el presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, tuvo que terminar apresuradamente un acto ante las protestas.
El PSdeG pidió la dimisión del copresidente de la caja, Mauro Varela, por declarar que los compradores de preferentes eran conscientes de los problemas del producto.