_
_
_
_
_
Tribuna
Artículos estrictamente de opinión que responden al estilo propio del autor. Estos textos de opinión han de basarse en datos verificados y ser respetuosos con las personas aunque se critiquen sus actos. Todas las tribunas de opinión de personas ajenas a la Redacción de EL PAÍS llevarán, tras la última línea, un pie de autor —por conocido que éste sea— donde se indique el cargo, título, militancia política (en su caso) u ocupación principal, o la que esté o estuvo relacionada con el tema abordado

Música para un proyecto de futuro

"La FSMCV propone adaptar la gestión y los presupuestos futuros a la situación actual, iniciar acciones de sensibilización y obtener créditos"

La Federació de Societats Musicals de la Comunitat Valenciana (FSMCV) celebrará, el 10 de junio una asamblea para informar a sus asociados sobre la evolución de los programas públicos de ayudas a las sociedades musicales y sus escuelas de música, así como para enfrentar con un proyecto de futuro la grave situación económica del colectivo producida por los impagos del Consell, que no ha abonado ni un euro de la financiación de 2011 y ha recortado un millón de euros (20,5%) a las escuelas de música. La financiación ha pasado de 6,4 millones en 2011 a 5,4 millones en 2012. Aunque Serafín Castellano, consejero de Gobernación, afirmó en las Cortes que se realizaría “una modificación presupuestaria” y que “no hemos hecho ningún recorte ni vamos a hacer ningún recorte”.

La FSMCV propone adaptar la gestión y los presupuestos futuros a la situación actual, iniciar acciones de sensibilización y obtener créditos de entidades financieras sensibles con el colectivo únicamente contra la garantía de la financiación aprobada por el Consell, sin comprometer el patrimonio y evitar la paralización y el colapso económico de las sociedades musicales, de la propia FSMCV y de su proyecto.

Social. Las sociedades musicales proporcionan una oportunidad de participación a toda la ciudadanía, fomentan la cultura del esfuerzo y educan a través de la música. Un colectivo formado por 538 sociedades (el 50% del total español), 40.000 músicos, 60.000 alumnos y más de 200.000 socios. ¿Se puede aprovechar mejor este capital humano?

Otras conocidas experiencias revelan la importancia social de la música: el sistema nacional de las orquestas juveniles e infantiles de José Antonio Abreu en Venezuela como instrumento de organización social o el Plan Nacional de Música para la Convivencia en Colombia (PNMC) con el que colabora la FSMCV.

Educativo. El sistema de enseñanza musical valenciano necesita un plan y una estrategia global y coherente para los más de 70.000 alumnos de escuelas de música, centros de música autorizados, conservatorios profesionales municipales y conservatorios superiores, que ayude a la sostenibilidad y al logro de los objetivos a los que una educación musical de calidad debe aspirar sin depender de políticas erráticas o recortes. Este proyecto sería exportable y brindaría oportunidades a miles de músicos. Además, la música puede hacer valiosas aportaciones en el ámbito de la educación, que están contrastadas por multitud de estudios de prestigio, como su impacto sobre el fracaso escolar. El camino sería la colaboración, el consenso y el rigor. ¿Por qué no empezamos a transitarlo sin complejos?

Económico y laboral. Las sociedades musicales son una industria con una producción anual de 60 millones de euros, que no puede pararse porque emplea a 2.575 personas y de la que dependen muchas empresas (instrumentos, edición musical, industria fonográfica, enseñanza…). Todos los proyectos en los que trabaja la FSMCV persiguen conseguir una oportunidad laboral a nuestros músicos. ¿Conjugar empleo y educación musical no sería importante para esta sociedad?

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
Suscríbete

Cultural. El principal agente cultural de la Comunidad Valenciana son las sociedades musicales, según un estudio de la Universitat de València. La música está presente en los auditorios de Alicante, Castellón y Valencia. Les Bandes a les Arts, un ciclo con margen de mejora, es el último enclave donde están actuando las bandas sinfónicas y, dentro del proyecto de la FSMCV Circuit de Concerts, se abre la puerta a otros recintos donde grupos instrumentales y de cámara podrán mostrar su calidad. ¿Hacemos de la colaboración una herramienta que impulse la industria cultural? En la asamblea debemos asegurar que la defensa de la música y las sociedades musicales posibilite que este proyecto social, educativo, económico-laboral y cultural sea un proyecto de futuro.

Josep Francesc Almería es presidente de la Federació de Societats Musicals de la Comunitat Valenciana (FSMCV).

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_