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López apela a la memoria para no “pasar página sin saber lo que ha pasado”

El ‘lehendakari’ defiende la reinserción para quienes “atacaron la libertad”

López, en primer término y ante otros cargos del Gobierno vasco, antes de inaugurar en Bilbao el congreso.
López, en primer término y ante otros cargos del Gobierno vasco, antes de inaugurar en Bilbao el congreso.TXETXU BERRUEZO

“Memoria y verdad frente a una mentira que busca olvidar el dolor causado”. Esa es la receta que ofreció ayer el lehendakari, Patxi López, para superar el “pasado violento” de Euskadi tras el fin de ETA. “Tenemos que pasar página, sí, pero después de haberlas leído todas para saber qué es lo que ha pasado”, consideró el jefe del Gobierno vasco, quien alertó sobre la pretensión de construir un relato de futuro “en el que las responsabilidades de quienes sustentaron el terrorismo aparezcan equiparadas con la lucha de quienes resistieron sus ataques”.

López presidió en Bilbao la inauguración del Congreso sobre Memoria y Convivencia, el ambicioso encuentro de carácter internacional con el que su Ejecutivo confía en desbrozar el camino de la paz en Euskadi a través del testimonio de víctimas del terrorismo y expertos en la materia. Durante su intervención, el lehendakari animó ayer a mirar al futuro tras el cese del terrorismo etarra, pero apeló a hacerlo desde el pasado, “sin renunciar a la verdad de lo ocurrido”.

Frialdad del nacionalismo

La inauguración del Congreso sobre Memoria y Convivencia congregó ayer en la sede de EITB en Bilbao a la plana mayor del PSE y a una delegación del PP encabezada por su presidente, Antonio Basagoiti, pero no contó con presencia nacionalista. El líder del PNV en Bizkaia, Andoni Ortuzar, justificó que el encuentro supone en realidad “una oportunidad perdida”, ya que no cuenta con “todas las voces”. “Si hablamos de memoria y convivencia, deben estar todas”, recriminó en Onda Vasca, en referencia al testimonio de víctimas distintas a las de ETA.

En una línea muy similar, el secretario general de EA y portavoz de Bildu, Pello Urizar, dijo en Radio Popular que le da “mucho miedo” que se hable de libertad y se utilice el “veto”, en referencia a la ausencia de la exetarra Carmen Gisasola.

Consciente del tirón electoral de la izquierda abertzale tras su renuncia a la violencia, el líder del Gobierno vasco subrayó que “no se puede permitir que los cómplices del terror en Euskadi se presenten hoy como los garantes del fin del terrorismo”. No obstante, y pese a esgrimir el fin de ETA como un logro de la política de “tolerancia cero”, matizó que “solo una sociedad fuerte puede mirar de frente a los autores del horror y proponer una salida de reinserción a todos aquellos que atacaron la libertad y las instituciones”.

Aunque sin una mención expresa, López quiso tener con su afirmación un guiño hacia una política penitenciaria más flexible y hacia la consideración de testimonios como el de la exetarra Carmen Gisasola, previsto para el congreso, pero vetado finalmente por el Gobierno central del PP. Si el lehendakari consideró ayer que “superar el pasado violento significa recuperar para la democracia a quienes antes la han atacado”, el presidente de los populares vascos, Antonio Basagoiti, respondió que la experiencia de alguien que ha pertenecido a ETA “solo puede ser un ejemplo para otros presos y no para el conjunto de la sociedad”.

Polémica al margen, el PP fue el único partido que respaldó ayer al PSE en la inauguración de las jornadas, a las que también asistió la comisaria europea de Interior, Cecilia Malmström. El ministro del ramo, Jorge Fernández Díaz, será el encargado de clausurar el congreso el domingo junto al consejero, Rodolfo Ares.

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