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MARTIN GARITANO | Diputado general de Gipuzkoa

“Yo excarcelaría mañana mismo a todos los presos de ETA”

Mikel Ormazabal
Martin Garitano.
Martin Garitano.JESÚS URIARTE

Martin Garitano, diputado general de Gipuzkoa, confiesa durante la conversación que su principal preocupación es “el paro que arrastra la crisis”.

Pregunta. ¿En qué ha cambiado la gestión de la Diputación con su llegada al cargo?

Respuesta. Nosotros queremos estar próximos a la ciudadanía, a los Ayuntamientos, al tejido empresarial y sindical. Es un modelo participativo.

P. ¿Qué decisiones concretas definirían el sello de Bildu?

R. El sello de Bildu es tener las puertas abiertas a todo el mundo.

P. Medidas concretas.

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R. Con las limitaciones que nos marca el presupuesto, nuestra prioridad es el gasto social. Ahí no escatimamos nada.

P. El gasto social también era una prioridad de sus antecesores. Ahí no hay ningún cambio.

R. Es verdad, pero daban prioridad a grandes infraestructuras como la incineradora, el superpuerto, las carreteras.

P. Bildu tiene ahora dos grandes líos: las basuras y los peajes.

R. En el tema de los residuos hemos hecho una apuesta decidida por el reciclaje. Eso no es un problema, sino una solución. El problema es construir una gran incineradora que crearía problemas de salud y no es acorde a las directivas europeas.

Perfil

Martin Garitano (Bergara, 1963) trabajó durante años como periodista y llegó a ser redactor jefe de Egin y, tras su cierre por orden judicial, subdirector de Gara. El pasado 23 de junio fue investido diputado general de Gipuzkoa, tras salir vencedor en las elecciones forales del mes anterior como cabeza de lista de la coalición abertzale Bildu. Así es como imagina la normalidad en Euskadi: "La normalidad política sería que un parlamentario del PP y yo vayamos juntos a votar en un referéndum por la autodeterminación y luego tomemos un café".

P. ¿Si se renuncia a la incineradora, se acabó el problema?

R. No queremos incinerar. Seguimos a pies juntillas las directivas europeas. En otros lugares con más población que Gipuzkoa se sigue el sistema puerta a puerta, una solución más ecológica, económica y saludable.

P. ¿Cuál es su modelo para tratar las basuras?

R. Hacemos una apuesta decidida por generar menos residuos, reutilizarlos, reciclarlos, metanizar una parte, compostar otra y para la fracción resto, que es en realidad la basura, hay sistemas mecánico-biológicos que permiten su inertización y su depósito en vertederos.

P. Los niveles de recogida selectiva con el puerta a puerta se pueden lograr en otros municipios sin emplear este sistema.

R. Parece que no es así donde está el quinto contenedor.

P. Porque el éxito del puerta a puerta se basa en obligar a separar la basura. Sería suficiente con extender esa imposición a todos los municipios.

El acuerdo que firmamos con el PNV no recogía evitar las críticas mutuas”

R. Sería suficiente con que toda la ciudadanía tomara conciencia de que hay que separar la basura, pero no es así, luego hay que regularlo.

P. ¿Y el conflicto con Bizkaia?

R. No hay conflicto. Se acaba un convenio, pero no queremos hacer de esto un problema interterritorial o interinstitucional.

P. ¿Qué solución darán a la financiación de las carreteras?

R. Nuestra propuesta es subir 50 céntimos el peaje en las autopistas en verano para aquellos conductores no habituales. Queremos reequilibrar el tráfico en Gipuzkoa de forma que no haya unas comarcas más castigadas que otras. Por eso, apoyamos una viñeta social para que todos los usuarios paguen igual, no unos más que otros.

P. ¿Peaje en Etxegarate?

R. No es nuestra propuesta en este momento.

P. Ustedes no eran partidarios de ampliar los peajes.

R. Es cierto, pero ante los 900 millones de deuda de Bidegi y un tráfico menor del que habían previsto quienes construyeron las carreteras, hemos llegado a la conclusión de que la red no se puede financiar sin peajes.

P. Este asunto abrió una polémica con el PNV y, sin embargo, apoyaron su presupuesto.

R. El acuerdo que firmamos no recogía evitar críticas mutuas.

P. ¿Sigue siendo el PNV su opción preferente?

R. Sí, pero no estamos cerrados al PSE y PP.

P. ¿La vía con el PNV se complica por la proximidad de las autonómicas?

R. Sí, porque ante unas elecciones todo el mundo cierra filas y marca posición.

P. ¿Se han limado asperezas con los empresarios?

R. Desconozco el grado de disgusto de la patronal con nosotros, pero no hemos tenido ningún roce. Tenemos relaciones normales con los empresarios y prueba de ello es que me he reunido con cinco grupos de empresarios la semana pasada.

No queremos incinerar. Seguimos a pies juntillas las directivas europeas”

P. ¿Y con los representantes de la patronal Adegi?

R. Tampoco es un terreno en el que tengamos mucho trabajo que hacer.

P. ¿Apoya reformar la Ley de Territorios Históricos (LTH)?

R. Estoy a favor de abrir una reflexión sobre la arquitectura institucional del conjunto de Euskal Herria, pero hagamos primero un país y diseñemos después su arquitectura institucional, no al revés.

P. ¿Cuál sería su propuesta sobre ese modelo institucional?

R. Lo pequeño es hermoso; lo que está cerca de la ciudadanía es bueno. Hay que evitar la duplicidad y buscar la complementariedad.

P. La oposición viene repitiendo que Gipuzkoa está estancada por la inacción de la Diputación.

R. Se repite como un mantra, pero no se ajusta a la realidad. No hacer el superpuerto no significa que Gipuzkoa esté paralizada. Hoy, absolutamente nadie quiere el puerto exterior de Pasaia, por ejemplo.

P. ¿Y el AVE vasco?

R. No tenemos competencias en esa materia. He dicho siempre que no somos partidarios del TAV. En el Estado hay tramos enteros inutilizados y el grado de ocupación es insuficiente para justificar esas inversiones.Sin embargo, por razones políticas, el Gobierno vasco solo tiene dinero para el tren de alta velocidad. Nos parece lamentable.

P. ¿El acercamiento entre Bildu y Aralar podría facilitar que este partido asumiera alguna responsabilidad en su Gobierno?

R. Siendo evidente que hemos iniciado un proceso de convergencia, en este momento no estamos pensando en remodelar el Gobierno, pero no se puede descartar nada.

P. ¿Cómo imagina un escenario de convivencia normalizada y libertad?

R. Una situación normalizada sería que un parlamentario del PP y yo fuéramos juntos a votar en un referéndum por la autodeterminación y luego tomáramos un café. Cada vez estamos más cerca de que eso sea posible.

P. ¿No le parece que la situación es de bloqueo absoluto?

R. Basta con mirar la hemeroteca de hace un año para comprobar que las cosas no están tan bloqueadas. Se han dado muchos pasos en este país.

P. ¿Qué pasos habría que dar a partir de ahora?

R. La izquierda abertzale hizo una reflexión que le llevó a dar unos pasos, mientras la parte gubernamental no lo ha hecho con la misma valentía. En política, además de inteligencia, hace falta audacia y al Gobierno español le falta audacia.

Hagamos primero un país y diseñemos su arquitectura institucional después”

P. ¿Qué le recomendaría a Rajoy?

R. Que contribuya a normalizar la vida social y política de Euskal Herria. Y la situación de los presos está sobre la mesa.

P. ¿Qué solución hay que dar a los presos de ETA?

R. Los pasos son claros: repatriar a todos los presos políticos, porque es su derecho, excarcelar a quienes han cumplido tres cuartas partes de la condena, tumbar la doctrina Parot y, progresivamente, excarcelar a todos los presos políticos. Una sociedad que quiera ser normalizada no puede convivir con un colectivo de 600 presos políticos. Eso lo sabe también Rajoy.

P. ¿En qué plazo habría que excarcelar a todos los presos?

R. Yo lo haría mañana mismo.

P. ¿Con salidas individualizadas o en bloque?

R. Las salidas serán individuales, pero la solución tiene que ser global.

P. Luego el plan de reinserción del Gobierno se queda corto.

R. No da solución al problema y es más de lo mismo. Las recetas del pasado no valen para un futuro de normalidad democrática. Este Gobierno español y los anteriores han utilizado al colectivo de presos como una medida de chantaje.

P. ¿No cree que su propuesta de excarcelar a todos los presos de ETA causaría mucho dolor a las víctimas?

R. Aquí hemos visto cómo excarcelaban en plazo récord a Galindo, Vera o Bayo Leal. Algunos nos hemos sentido muy dolidos, pero parece que algunos no quieren acordarse de eso.

P. ¿Las víctimas tendrían que ir asumiendo la excarcelación de los etarras?

R. Las víctimas no pueden convertirse en un agente que obstaculice la normalización política de este país. Merecen todo el respeto, el reconocimiento y la reparación del daño, pero no pueden ser un obstáculo.

P. Estar en contra de una medida así no supone impedir la normalización.

R. Un país normalizado es un país sin presos políticos. Quien se ponga enfrente de esto está obstaculizando un futuro de normalidad política.

P. ¿Va a hacer algún gesto con las víctimas de ETA?

R. Invité a las asociaciones de víctimas de ETA y no quisieron acudir a la cita. Nosotros lo respetamos y reiteramos que las puertas de esta Diputación están abiertas a todo el mundo.

P. La Diputación aprobó en la pasada legislatura celebrar un acto anual de apoyo a las víctimas. ¿Respetará esa decisión?

R. Eso fue un acuerdo del anterior Gobierno foral. Nosotros no nos sentimos vinculados.

P. ¿Quitará la bandera española del palacio foral?

R. ¿Dónde está? Yo no la he visto. Me dicen que está en el tejado, pero yo no he subido.

P. La bandera está.

R. Nosotros no hemos puesto ni quitado nada.

P. Ustedes fueron muy beligerantes contra quienes la pusieron contra su voluntad.

R. Le repito, no sé si está.

P. ¿Será legal Sortu?

R. En Europa no se entendería que en un Estado miembro haya un partido ilegalizado por razones ignotas.

P. ¿Qué escenario poselectoral contempla?

R. La realidad política vasca es tan cambiante que vamos a ver escenarios que ahora mismo parecen irreales.

P. ¿Está siguiendo el juicio contra José María Bravo?

R. Por supuesto. Me parece una tragedia política que en la Diputación de Gipuzkoa haya sucedido esto. Nuestra obligación es exigir la máxima contundencia penal para lo que ha sido un capítulo de vergüenza. No hay ánimo de venganza, pero el dinero tiene que volver a estas arcas.

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Sobre la firma

Mikel Ormazabal
Corresponsal de EL PAÍS en el País Vasco, tarea que viene desempeñando durante los últimos 25 años. Se ocupa de la información sobre la actualidad política, económica y cultural vasca. Se licenció en Periodismo por la Universidad de Navarra en 1988. Comenzó su carrera profesional en Radiocadena Española y el diario Deia. Vive en San Sebastián.

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