Seat presenta en China el nuevo Ibiza deportivo
La firma participa en el salón del automóvil de la capital china
Seat ha vuelto por tercera vez a China, esta vez para quedarse. Coincidiendo con el Salón del Automóvil de Pekín, en el que participará, la firma española del Grupo Volkswagen inaugurará sus primeros concesionarios en Asia el próximo martes y presentará las novedades que tiene en cartera. El domingo por la noche, hora local, y en el marco de la Volkswagen Group Night, en la que cada marca presenta sus novedades, los responsables de la histórica marca española presentaron el prototipo del Seat Ibiza Cupra, la versión deportiva del modelo más vendido de los que se fabrican en Martorell (Baix Llobregat), que acaba de estrenar nuevo modelo. Amarillo, con techo solar y de dinámicas líneas laterales en paralelo, el Cupra que pudo verse en el show del grupo, celebrado en el edificio cúbico que alberga la piscina olímpica, estará a la venta a finales de año.
Una inversión de 14.000 millones
El Grupo Volkswagen lidera el mercado chino, donde el año pasado vendió 2,2 millones de vehículos en una economía que compra más de un millón de coches cada mes. Sus ventas, durante el primer trimestre de este año suponen el 19,7% de la cuota de mercado chino. La apuesta por China pasa también por la fábrica que la compañía ya tiene en el país y por una nueva que está construyendo y que está previsto que opere el año que viene.
Las plantas y la red comercial, que en los dos últimos años han supuesto una inversión de 6.000 millones de euros, se multiplicarán más del doble hasta 2016, un periodo durante el que el grupo piensa invertir 14.000 millones de euros según el vicepresidente ejecutivo del grupo Volkswagen en China, Weiming Soh. La previsión del grupo es que la red comercial dé un gran salto, de 623 vendedores en 2011 a 3.000 en 2018. En total, está previsto que en 2012 y 2013 la multinacional de origen alemana lance 45 nuevos modelos.
La presentación de este prototipo en China no es casual. Seat ha elegido su modelo más deportivo, el Ibiza, para desembarcar en el gigante asiático. El objetivo es seducir a los jóvenes de la nueva y emergente clase alta china, nacidos a partir de la década de 1980, que son el 43% de los compradores de vehículos. La marca se ha fijado unas ventas de entre 3.500 y 4.000 unidades en este primer año en China.
La versión deportiva del nuevo Ibiza presentada en Pekín tiene 180 caballos de potencia, caja de cambios DSG de siete velocidades —muy cortas y que se pueden accionar desde el volante—, diferencial autoblocante electrónico XDS y un potente sistema de frenos. Equipado con la última tecnología, una de las novedades que incorpora es el Seat Portable System, un sistema en formato extraíble que combina las funciones de navegador y consola de entretenimiento, ubicado sobre el salpicadero, en el centro del vehículo.
El presidente de Seat, James Muir, defendió que el nuevo Ibiza ejemplifica “la evolución de la marca” por su diseño y destacó que presentan este modelo en el salón de Pekín, donde la firma ha invitado a un grupo de periodistas, entre ellos EL PAÍS, porque “este compacto deportivo tendrá un papel destacado en el desarrollo de nuestra marca en el importantísimo mercado asiático”.
La primera generación de Ibiza deportivo apareció en 1996 con una versión que conmemoraba la victoria en el Campeonato del Mundo de Rallies en la categoría de dos litros. Y 16 años después, el vicepresidente ejecutivo de I+D de Seat, Matthias Rabe, destaca del nuevo modelo su “aceleración inmediata y constante, con un tacto ágil y dinámico, buena adherencia y un equipo de frenos infatigables”. “El nuevo Ibiza Cupra es un ejemplo perfecto de cómo Seat adapta la última tecnología del Grupo Volkswagen para crear un vehículo único y altamente gratificante”.
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