Interior ultima la puesta en marcha de la web para denunciar a alborotadores
Los Mossos colgarán en la red imágenes de violentos que no han logrado identificar
El Departamento de Interior tendrá lista a mediados de la semana que viene una página web para que los ciudadanos puedan identificar a los alborotadores responsables de la violencia callejera. La iniciativa la anunció el consejero Felip Puig a raíz de los graves altercados de la huelga general del pasado 29 de marzo, que asolaron el centro de Barcelona.
Los Mossos colgarán en la red imágenes de violentos que no han logrado identificar y los ciudadanos podrán informar a la policía si reconocen quiénes son. La página también admitirá denuncias, pero finalmente no serán anónimas como insinuó inicialmente Puig. La web dispondrá de un registro donde deberá constar el nombre completo y un número de teléfono o una dirección de correo electrónico del denunciante, aunque será una información confidencial.
El diseño de la página es todavía provisional, pero Interior ha preparado una primera versión para que ya esté en marcha ante las citas de riesgo que vivirá Barcelona en las próximas semanas: el Día del Trabajo (1 de mayo), la cumbre del Banco Central Europeo (días 2 y 3) y el aniversario del Movimiento 15-M (del 12 al 15).
Las primeras fotografías que aparecerán en la web recogen imágenes de personas que participaron en altercados el pasado 29-M y que no han sido detenidos todavía porque se desconoce su identidad. Los Mossos arrestaron el jueves a seis personas más —cuatro en Barcelona y dos en Tarragona—, que se suman a los 79 detenidos el día de la huelga. Dos de ellos han quedado en libertad con cargos y el juez debe decidir aún sobre los otros cuatro barceloneses. Ayer se hicieron al menos dos entradas y registros en pisos de Barcelona de los detenidos por orden del juez para dar con indumentaria y otras pruebas que puedan incriminarles.
Los ‘mossos’ celebran su día con una gran pitada a Puig
Una alfombra roja en la puerta del Auditori de Barcelona esperaba ayer al consejero de Interior, Felip Puig, que debía presidir el Día de las Esquadras, la fiesta de la policía catalana. A un lado, la representación de las distintas unidades del cuerpo; al otro, los sindicatos, pertrechados con silbatos, pitos, petardos y cualquier elemento que sirviese para gritar al titular de Interior que están en contra de los recortes. Abrumado por la sonora pitada, Puig pasó revista rápidamente a las unidades. Los mandos policiales ni siquiera le recibieron en la alfombra, como habían hecho hasta ahora, para no aguantar el chaparrón y evitar la foto de una policía en guerra con sus jefes.
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