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Nuevo PSC con caras viejas

Cuatro meses después del congreso, los socialistas mantienen su antigua imagen y no despegan

El portavoz parlamentario del PSC, Miquel Iceta (izquierda), con el presidente del grupo parlamentario, Joaquim Nadal.
El portavoz parlamentario del PSC, Miquel Iceta (izquierda), con el presidente del grupo parlamentario, Joaquim Nadal. MARCEL.LÍ SÀENZ

Ya hace cuatro meses que Pere Navarro asumió la dirección del llamado “nuevo PSC”, pero el partido sigue sumido en el letargo en que lo dejaron las sucesivas derrotas electorales, y las caras visibles en el Parlament, que es el centro de la actividad política, siguen siendo las mismas de antes. Si, tras el congreso de Sevilla, Alfredo Pérez Rubalcaba tardó 24 horas en cambiar al secretario general del grupo parlamentario y al portavoz en el Congreso, en el caso del PSC, la renovación de su imagen en el Parlament ni ha llegado ni se la espera.

Joaquim Nadal, de 64 años y diputado desde hace 28, excandidato a la Generalitat y exconsejero del tripartito, sigue siendo el presidente del grupo y el jefe de la oposición, y Miquel Iceta, diputado desde hace 13 años, continúa como portavoz. Es decir, las dos caras visibles del nuevo PSC no son precisamente un ejemplo de la pretendida renovación que proclamó Navarro.

La dirección admite que tiene un problema de imagen en el Parlament, pero nada apunta a soluciones inmediatas

La dirección admite que tiene un problema de imagen en el Parlament, pero nada apunta a soluciones inmediatas. “El proceso de cambio está en marcha y combinar seniors con juniors siempre nos ha parecido una buena fórmula, al margen de los nombres que se pongan”, dice Jaume Collboni, portavoz del PSC y diputado. Él representa la nueva hornada del partido, junto con Rocío Martínez-Sampere, Eva Granados, Consol Prados y Laia Bonet, formalmente la portavoz adjunta, pero con un protagonismo que no corresponde a esa función.

Y es que la imagen de la bancada socialista tiene más de pasado que de futuro. De los 28 diputados, cinco son exconsejeros (Marina Geli, Joaquim Llena, Ernest Maragall, Caterina Mieras y Montserrat Tura) y también hay un exministro (Celestino Corbacho). Algunos diputados llevan en el cargo seis legislaturas (Joan Ferran) y hasta siete de las nueve legislaturas (Manuela de Madre). Caso aparte es el Higini Clotas, que suma 32 años en el escaño.

“Si decidieron no hacer cambios, sus razones tendrán”, dice un veterano diputado que reclama el anonimato, “pero lo que es más que evidente es que los nuevos que mandan no están en la Cámara”. El PSC y ERC son los únicos partidos cuyo líder no ocupa escaño en el Parlament, pero es que en el caso de los socialistas no hay nadie del núcleo duro de la dirección en el parque de la Ciutadella. El primer secretario, Pere Navarro, es alcalde de Terrassa. El secretario de Organización, Dani Fernández, ocupa escaño en el Congreso y si bien hace cuatro meses se dijo que vendría a Barcelona para dedicarse al PSC, finalmente no ha sido así. Y el número tres es Antonio Balmón, alcalde de Cornellà.

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En las sesiones de control al presidente de la Generalitat quien pregunta es Joaquim Nadal y su segundo de a bordo es Miquel Iceta

Fue el mismo Celestino Corbacho el que dijo que llevaba 15 años viendo las mismas caras en el PSC, y en el caso del Parlament es bastante claro. No tanto en la ejecutiva, que se renovó a fondo tras el congreso, pero de la que, por ejemplo, sigue formando parte Corbacho como presidente del consejo nacional del partido. Y de allí desaparecieron José Montilla, José Zaragoza y Miquel Iceta.

Collboni responde con un “ya se verá” cuando se le pregunta si no habrá cambios en el grupo parlamentario durante esta la legislatura e insiste en que Nadal e Iceta cuentan con la confianza de la dirección. También señala que “el partido combina experiencia y renovación”, y recuerda que “en temas claves que se debaten en el Parlament intervienen nuevas caras, como Martínez-Sampere o Eva Granados”. Es cierto, pero en las sesiones de control al presidente de la Generalitat quien pregunta es Joaquim Nadal y su segundo de a bordo es Iceta.

Pero más allá de las caras y de la falta de liderazgo que se atribuye en algunos sectores a Navarro, empieza a extenderse la opinión de que el “nuevo PSC” no despega. Lo dicen las encuestas y lo avala la realidad. El ejemplo más claro se vio hace unos días, en el llamado pleno de los recortes. Era una apuesta política del PSC reclamar ese debate (solo lo puede hacer una vez al año) y el papel del partido y de Joaquim Nadal pasó con mucha más pena que gloria.

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