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"El aire de la Comunidad de Madrid es bueno"

La consejera de Medio Ambiente, Ana Isabel Mariño, asegura que el aire "está mucho más limpio que hace una década"

Elena G. Sevillano

"El aire de la Comunidad de Madrid es bueno", ha asegurado esta mañana la consejera de Medio Ambiente y Ordenación del Territorio, Ana Isabel Mariño. Tras una visita a la finca El Encín de Alcalá de Henares, la consejera ha hablado sobre contaminación y acerca de la solicitud de prórroga que ha hecho llegar a la Comisión Europea para que le conceda cinco años más y así tratar de respetar los límites de dióxido de nitrógeno, el único contaminante en el que la región suspende.

Mariño ha destacado que "el aire está hoy mucho más limpio que hace una década" y ha ofrecido porcentajes de descenso en los contaminantes. En el caso del dióxido de nitrógeno, la concentración se ha reducido un 50% en 10 años, mientras que las partículas en suspensión han caído un 35%, según sus datos.Y eso se ha conseguido, ha afirmado, pese a que "la población ha crecido, el parque de vehículos ha aumentado un 25%, ha habido muchos periodos anticiclónicos", entre otras cuestiones. La crisis, ha añadido, ha hecho que el parque de automóviles esté más envejecido de lo que debería. También ha mencionado las "políticas fiscales de apoyo al diésel".

Pese a que la región ha mejorado en calidad del aire en los últimos años, lo cierto es que la Comunidad de Madrid ha pedido una prórroga de cinco años a Europa porque en 2010 incumplió los valores máximos de dióxido de nitrógeno en dos estaciones de medición situadas en Coslada y Leganés. Fue el primer año en el que era obligatorio estar por debajo de un determinado nivel de contaminación: 40 microgramos por metro cúbico de media anual. Coslada registró 47 y Leganés, 44.

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Sobre la firma

Elena G. Sevillano
Es corresponsal de EL PAÍS en Alemania. Antes se ocupó de la información judicial y económica y formó parte del equipo de Investigación. Como especialista en sanidad, siguió la crisis del coronavirus y coescribió el libro Estado de Alarma (Península, 2020). Es licenciada en Traducción y en Periodismo por la UPF y máster de Periodismo UAM/El País.

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