_
_
_
_
_

La compañía de María Pagés abandona Torrelodones

La bailaora se marcha del teatro de la ciudad por diferencias con el Ayuntamiento Busca una nueva ubicación en la Comunidad de Madrid

“He tenido la sensación de que he sido utilizada políticamente”. Así justifica María Pagés su decisión de abandonar el municipio madrileño de Torrelodones, donde su compañía tenía la residencia desde hace 12 años. La bailaora y Premio Nacional de Danza deja a la ciudad con pesar, tras no haber llegado a un acuerdo con el Ayuntamiento, con el que las conversaciones “ya estaban muy avanzadas con intenciones de seguir” antes de las elecciones.

“A veces los cambios políticos hacen olvidar a la gente lo que tienen entre manos. Hemos sido un ejemplo para las otras compañías residentes en la Comunidad de Madrid, este es un paso que hemos dado Torrelodones y yo juntos. La cultura no puede servir para ningún tipo de venganza política”, explica Pagés desde Amberes, donde presenta su montaje Dunas. El desacuerdo al que se refiere es con el Consistorio gobernado por el partido Vecinos por Torrelodones con el apoyo del PSM y Actúa.

Según la bailaora, el pacto se ha roto por las “malas vibraciones” que le transmitían las personas con las que se ha negociado la continuidad. “Para esto yo no me fijo en el partido ni en la política, sino en las personas. Y en este caso me he sentido instrumentalizada políticamente”, explica. Este periódico ha intentado sin éxito hablar con los responsables de Cultura del Ayuntamiento de Torrelodones para conocer su versión.

La Compañía de María Pagés se convirtió en residente en Torrelodones con un acuerdo de acercar el mundo de la danza y el flamenco a la ciudad. Allí ha realizado actividades para niños y discapacitados, ensayos con charla posterior para los mayores, colaboraciones con la Escuela de Danza local “siempre potenciando el trabajo que hace el maestro de la escuela, nunca imponiendo”, y sus ensayos eran abiertos al público. Además, el acuerdo fijaba que sus montajes, de una altísima calidad, pasaran por Torrelodones en algún momento de la gira y concienciaba a los niños en los colegios para que conocieran el mundo de la danza.

“He cumplido una etapa feliz y creo que ha llegado a su término”, explica Pagés, que agradece estos años a los habitantes de Torrelodones. Ahora, busca una nueva ubicación para la sede de la compañía. “Nuestra idea ahora es ver nuestras posibilidades. Pero quiero que la compañía siga teniendo su base en la Comunidad de Madrid”, concluye Pagés.

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
Suscríbete

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_