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La Xunta termina con el patrocinio a compañías aéreas

Ryanair mantiene su convenio por el que recibirá dos millones hasta 2013

La política de subvencionar vuelos ya no tiene cabida en la Xunta. Si el conselleiro de Medio Ambiente empezaba el 2011 repartiendo tres millones de euros a las compañías aéreas, un año después Agustín Hernández ratificó un cambio de ruta en la política de la Xunta que se empezaba a intuir: el regreso a las campañas de promoción de los destinos.

La publicidad para promocionar las Rías Baixas y A Coruña en las ciudades que ya están conectadas de forma directa con Peinador y Alvedro se llevará dos millones de euros este año. Serán presentaciones a turoperadores, campañas en medios o paquetes turísticos, entre otros, para aumentar los pasajeros de los que se quedará fuera Santiago. A la capital gallega no le toca este año. Hernández explicó ayer, tras una reunión con representantes del sector de la hostelería y el turismo, que la Xunta tiene que pagar este año lo que resta de su convenio con la compañía irlandesa de vuelos baratos Ryanair: un millón por 2012 y otro por 2013. “Cuando proceda se comunicará a la empresa la no continuación de la vinculación. No tenemos más remedio que cumplir ese contrato”, alegó el conselleiro según informa Europa Press. Esta es la primera fase —la de 2012— de la nueva estrategia turística de la Xunta, que el próximo año —ya incluyendo a Santiago— promocionará Galicia como destino único a través de los tres aeropuertos. Los detalles concretos de cada una de las dos fases no estarán listos hasta marzo o abril.

En un año, la Xunta ha pasado de subvencionar de forma “equilibrada” compañías en los tres aeropuertos a abandonar la política del pago. Cuando, con el otoño, se acercó el final de los convenios con las aerolíneas, los alcaldes de Vigo y A Coruña se apresuraron a negociar, con dinero de las arcas municipales, las conexiones. Con la veda abierta, el presidente Núñez Feijóo cambiaba de discurso y afirmaba contratar las líneas está en las manos de los alcaldes y que nadie puede ser coordinado si no quiere. Aún así, no aclaraba en qué se consistiría el papel de la Xunta, que disculpaba su indecisión alegando, en el mes de septiembre, que aún estaba preparando los presupuestos. Mientras, solo el alcalde de Santiago, el popular Gerardo Conde Roa, apostaba abiertamente por un cambio de modelo que desterrase las ayudas, disfrazadas de contrato publicitario, con las compañías.

Infraestruturas justifica el cambio en la eficiencia del gasto: “Vincular la promoción turística a un determinado número de conexiones no fue eficaz, ya que estamos comprobando que hay una disminución de los usuarios”, apuntó Hernández. Los números indican, sin embargo, que solo pierden pasajeros los aeropuertos de Vigo (un 10,7% menos) y A Coruña (un 8% menos). Santiago cerró el pasado año con su mejor marca con 2,4 millones de pasajeros, un 13,4% más que en el año anterior, que además era Xacobeo. El arranque de 2012 sí registró caídas en las tres terminales. El dinero que invertía la Xunta para mantener rutas con compañías de bajo coste suponía pagar 102,6 euros por cada pasajero que despega o aterriza en Peinador, 36,7 euros por cada uno que lo hace desde el aeropuerto de Alvedro y 6,7 euros por viajero en Lavacolla.

De la vieja política no queda nada más que el empeño en recalcar que el reparto de medios se hace de forma “equitativa y equilibrada” entre los tres aeropuertos para no herir suspicacias locales. El conselleiro centró sus palabras en el alcalde de Vigo, el socialista Abel Caballero, —en A Coruña y Santiago los regidores son del PP— al que pidió que olvide “esa permanente actuación de bloqueo de las iniciativas de la Xunta” y a que “sume esfuerzos” para conseguir incrementar el número de pasajeros.

Hernández valoró también la propuesta del alcalde compostelano de instalar una parada del AVE en Lavacolla, aunque sin manifestar un apoyo claro: “Creo que ese planteamiento obedece a una idea positiva que hay que analizar y evaluar económica y financieramente”, afirmó antes de insistir en que hay que mejorar las conexiones entre los tres aeropuertos. Conde Roa comparó ayer su propuesta con la llegada del hombre a la Luna, al equiparar su “desafío” con el que lanzó el presidente norteamericano John Fitzgerald Kennedy cuando se propuso superar a la Unión Soviética en la carrera espacial, recoge Europa Press. El regidor apuntó que para unir el tren y la terminal “basta con hacer un apeadero” y construir unas dársenas para los autocares.

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