La Guardia Civil intercepta 6,5 toneladas de boquerón inmaduro
La Unión Europea mantiene en el punto de mira la pesca clandestina española
La Guardia Civil intervino 6.500 kilos de boquerón en el puerto de Barcelona el pasado 31 enero. El pescado medía siete centímetros de largo, cuando el mínimo permitido para su captura es de 12 centímetros. La pesca, interceptada en las cajas descargadasy a bordo del barco, está valorada en 120.000 euros. Los agentes denunciaron a un vecino de Vilanova i Geltrú (Garraf) como presunto responsable. Las casi siete toneladas de peces inmaduros han sido cedidas a la fundación benéfica Banco de Alimentos después que un veterinario certificase la seguridad del pescado para el consumo humano.
La pesca de los ejemplares más pequeños no ha cesado en España a pesar de las campañas y las sanciones europeas. En 2007 la Comisión Europea denunciaba a España ante el Tribunal de Justicia de la Unión Europea por "no haber asegurado el control necesario para evitar" la captura y venta de peces inmaduros. La pesca clandestina en Andalucía estaba en el punto de mira. La popular tapa de chanquetes alimentaba un negocio con pescados diminutos, ya que no superaban los ocho centímetros. El pasado noviembre el Parlamento Europeo apostó por la lucha contra la pesa ilegal.
La Comisión Europea considera urgente gestionar las pesquerías comunitarias, atajar la sobrepesca, defender la sostenibilidad y respetar las tallas mínimas. Para ello, los controles y las normas europeas sobre la pesca se han endurecido desde 2010. La pesca de los ejemplares más pequeños se considera infracción muy grave, según la directiva europea. Las sanciones económicas pueden oscilar entre 5.000 y 50.000 euros, además de la retirada de la licencia de pesca y la inhabilitación para obtenerla durante un plazo de entre 3 y 10 años.
La pesca clandestina y las infracciones continúan desafiando las leyes de la Unión Europea. El Instituto de Oceanografía, vinculado a la Red Europea de Observación y Datos Marinos, se encarga de la aplicación de la política marítima europea. Una de sus políticas es la planificación medioambiental. Los daños de este tipo de pesca son irreparables. Como indica el Instituto Español de Oceanografía, un kilo de alevines pueden convertirse, cuando sean adultos, en 300 kilos de pescado.
