La Fundación Pasqual Maragall se instalará en la UPF

La Universidad Pompeu Fabra (UPF) de Barcelona acogerá a partir de 2014 la nueva sede social de la Fundación Pasqual Maragall de investigación sobre la enfermedad de Alzheimer en el campus de la Ciutadella. La nueva instalación es un replanteamiento del proyecto inicial, que preveía la ubicación de la sede en un complejo al lado del hotel W que quedó descartado por efecto de la crisis. "Aunque es un efecto colateral de la crisis, la solución final es preferible", ha explicado Jordi Camí, presidente de la fundación, Pasqual Maragall, Jordi Camí.

"Seremos capaces de hacer un proyecto así en estos momentos si tenemos ilusión y si creemos en el futuro", ha confiado el rector de la UPF, Josep Joan Moreso, en la firma del convenio por el que la universidad cede a la Fundación el terreno para construir el edificio a cambio de un canon.

El edificio que acogerá la sede de la fundación ha sido diseñado por el arquitecto Juan Navarro Baldeweg, el mismo que realizó el primer edificio del campus Ciutadella que da a la calle de Wellington y donde la UPF construirá un segundo inmueble para el parque de investigación de Ciencias Sociales y Humanidades. La sede de la fundación supone una inversión de 14 millones -aportados por patrones e inversores privados, además de algún crédito público-, unos siete se dedicarán a obras, y el resto a equipamientos. El edificio dispondrá de 4.300 metros cuadrados distribuidos en cinco plantas y se dedicará casi por completo a nuevos laboratorios de investigación, aunque destaca también la instalación de una plataforma tecnológica de neuroimagen orientada a la investigación clínica.

Las obras comenzarán este año y terminarán a finales de 2013, por lo que el traslado al nuevo edificio no tendrá lugar hasta 2014. Camí ha defendido esta nueva ubicación, que estará a "solo 10 minutos" del Parque de Investigación Biomédica de Barcelona (PRBB, en sus siglas en catalán), institución en la que se integran sus proyectos investigadores.

Actualmente, la fundación tiene nueve proyectos en curso -el traslado supondrá que se centre más en investigación y pierda en infraestructura asistencial-, y cuando funcione a pleno rendimiento contará con unos 200 profesionales trabajando en su seno. Los proyectos científicos buscan la detección precoz y prevención secundaria de la enfermedad -partiendo de la hipótesis de que registra una época "silenciosa" en la que no se manifiesta- así como desarrollar recursos tecnológicos avanzados para el estudio científico del cerebro.

Pasqual Maragall, exalcalde de la ciudad y expresidente de la Generalitat, ha bromeado asegurando que en la enfermedad de Alzheimer se encuentra "en buena compañía", por pertenecer a una generación de personas que la sufren, como el expresidente Adolfo Suárez.