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Gipuzkoa reordena su red de acogida de menores para evitar más incidentes

La Diputación descarta el cierre o poner guardas de seguridad en los centros de atención

El País
Donostia-San Sebastián -
El diputado de Política Social de Gipuzkoa, Ander Rodríguez, a la derecha, acompañado ayer por el director foral Jon Lasa.
El diputado de Política Social de Gipuzkoa, Ander Rodríguez, a la derecha, acompañado ayer por el director foral Jon Lasa.JAVIER HERNÁNDEZ

La Diputación de Gipuzkoa ha iniciado un proceso de reordenación de la red de pisos de acogida a la infancia y a la adolescencia con el objetivo de “dar respuesta a las carencias detectadas en este servicio” y adaptarla al considerable incremento de autóctonos atendidos en estos recursos. Entre las principales medidas, el Gobierno foral de Bildu aplicará una reducción de plazas en los pisos, el cierre de los centros de acogida de urgencia, el aumento del personal educador y la mejora de las condiciones laborales de los trabajadores, según informó ayer el diputado de Política Social del territorio, Ander Rodríguez.

El Ejecutivo foral confía en que esta nueva planificación servirá también para evitar que se repitan incidentes como los acaecidos este mes en los centros de Zizurkil y Hernani. En este sentido, Rodríguez descartó tomar medidas drásticas, como el cierre de este tipo de viviendas o poner guardas de seguridad porque lo impide la legislación vigente. El diputado se refirió a los hechos sucedidos el pasado día 19 en un piso de Hernani, cuando varios menores presuntamente agredieron a una ertzaina y a una educadora. En el caso de Zizurkil, una vecina ha denunciado problemas de convivencia con chavales autóctonos acogidos en una vivienda contigua a la suya.

Rodríguez ha confirmado que la Diputación está tratando de solventar estos problemas y tiene previsto insonorizar la vivienda de Zizurkil, analizar si es necesario reforzar el número de educadores y trasladar a alguno de los menores a otro centro que se ajuste mejor a sus características. En todo caso, la Diputación no cerrará estos pisos porque las personas atendidas tienen que estar en entornos urbanos para facilitar su reinserción social, indicó Rodríguez, quien reconoció que es “lógico” que en algunas ocasiones se produzcan tensiones con los vecinos.

La supervisión de estos casos se acompasará con una reorganización del servicio de acogida de menores de Gipuzkoa. Esta reorientación está motivada, apuntó Rodríguez, por el fuerte descenso de extranjeros atendidos —han pasado de 221 a 78 en los últimos tres años— y el incremento de jóvenes autóctonos, que suman ya 196 frente a los 154 que había en 2008. En una comparecencia ante las Juntas Generales, el diputado de Política Social aclaró que esta tendencia ha obligado a reconvertir tres centros de menores no acompañados para acoger a chavales autóctonos.

Los extranjeros atendidos han pasado de 221 a 78 en solo tres años

Cuando concluya el proceso de reformulación de este servicio, previsto para el próximo mes de julio, la Diputación guipuzcoana espera contar con un total de 314 plazas de acogida en 34 centros distribuidos por San Sebastián y otros 17 municipios de la provincia.

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Rodríguez quiso aclarar que no se cerrará ningún centro para no perjudicar a los trabajadores, aunque sí se reducirán más de 60 plazas, lo que aumentará el ratio de educadores y trabajadores sociales, tal y como marca la normativa en vigor. A estos profesionales se les mejorarán sus condiciones salariales a partir del próximo mes, retrasos incluidos, tras las reuniones que responsables del Departamento de Política Social han mantenido con los sindicatos y las empresas del sector. “Su trabajo es cada día más complicado, pero su implicación es total para conseguir que estos niños y niñas se doten de herramientas para salir adelante en la vida”, manifestó Rodríguez.

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